Los niños son los seres más bondadosos y basta un acto de amor para que te conmueva hasta las lágrimas. Un ejemplo de ello es la historia de Caroline Cronk, quien con sólo 5 años, conmovió al mundo entero.
Su historia es una lección de vida, víctima del cáncer perdió la batalla de la vida pero nos dejó un tesoro invaluable, el amor a una causa y el afán de la su historia no se repita.
En el 2012, antes de cumplir 5 años, sus padres la llevaron a la sala de emergencias ya que había mostrado problemas en sus clases de baile. El médico no tenía buenas noticias, una masa había aparecido en su cerebro según revelaron los estudios y tenía que iniciar tratamiento cuanto antes.
A esa mala noticia se sumó que Caroline debía ser parte de un tratamiento experimental ya que desde hacía 30 años, no se habían realizado investigaciones sobre el tipo de cáncer padecía. Si bien, esta enfermedad afectaba a 200 niños al año, el 2% de ellos sobrevivía ¿podría ser Caroline uno de los sobrevivientes?
Desde que la pequeña inició el tratamiento, el periódico local cubrió la historia y gracias a ello, miles de personas empezaron a llevar regalos y cheques para que la familia pudiera costear el tratamiento. Este dinero se convirtió en la semilla de una fundación que inició nuevas investigaciones sobre el padecimiento. A petición de Caroline, ella deseaba que ninguna familia viviera lo que la suya estaba pasando.
Transcurrieron 12 semanas de tratamiento intenso, pero el tumor de Caroline no disminuía y empezó a afectar sus habilidades motoras y de habla. Algunos habitantes de la misma ciudad empezaron a construirle una piscina en casa, ella amaba nadar y pudo estrenarla 5 días antes de irse al cielo.
En este lapso, la comunidad también se organizó para una carrera atlética, en donde al correrse la voz, más de 2 mil personas participaron, incluyendo a personas con capacidades especiales. Lo que el evento recaudó reunió lo suficiente para continuar las investigaciones de la enfermedad que cobró la vida de Caroline, a pesar del avance de su padecimiento, ella agradeció a los participantes la esperanza de vida que estaban dando a otras personas.
Debido a que su salud cada vez se deterioraba más, se adelantó su recital de baile y su fiesta de cumpleaños, su familia ya estaba preparada para decirle adiós. Habían pasado 9 meses desde que le detectaron cáncer cuando Caroline falleció. A pesar de que han pasado dos años desde su muerte, la comunidad sigue apoyando las investigaciones de este peculiar tipo de cáncer.
¿Te sumarías a una causa tan noble?
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